El Ing. Agr. Eduardo Sierra, especialista en clima, indicó: “Cambió el patrón de comportamiento de los vientos alisios. A partir de esto, la Niña se está disipando. Esperamos que se vaya estabilizando el proceso climático. Las lluvias van tomando estabilidad, que probablemente nos lleve lo que queda de noviembre y todo diciembre. Se espera que en enero ya podamos estar en un período de precipitaciones estables”.
En cuanto al impacto del clima en los cultivos expresó que “La cebada ha sufrido, el trigo ha sufrido y es posible que, de eso, con estas lluvias, se recupere poco. Lo van a decir los volúmenes de cosecha dentro de poco. Estamos con una cosecha de entre 13 y 17 toneladas de trigo, es decir, con una pérdida de entre el 30 y el 40%, parecido pasa con la cebada, con las pasturas planchadas y una cierta liquidación del stock ganadero. No se pudieron sembrar los cultivos tempranos y estamos jugados en el repechaje de la campaña, cultivos de maíz y soja tardíos. Ahora, parece que el clima está queriendo arreglarse para dar oportunidad a una buena cosecha de maíz y girasol”.